Se dice que un excelente y eximio jugador de golf, conocido como “Pato”, concurrió a La Morocha a ver un espectáculo de Ulises Bueno y terminó en un muy mal estado, ya que mucha gente admite haberlo visto al deportista con muchas copas de más bailando al ritmo del tunga tunga. ¡¡Eso es darse gustos en la vida!!